Alec miró abajo hacia las piezas destrozadas.
-Has ROTO mi TELÉFONO.
Jace se encogió de hombros.
-Los
tíos no dejan que otros tíos llamen a otros tíos. Vale, eso no ha sonado
bien. Los amigos no dejan que los amigos sigan llamando a sus ex y
cuelguen. En serio. Tienes que parar.
Alec se veía furioso.
-¿Por eso has roto mi nuevo teléfono? Muchas gracias.
Jace sonrío serenamente y se tumbó en la hierba.
-De nada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario